Mejora tu entorno.
Toma unos minutos de cada día para mejorar el lugar donde vives.
Arregla, limpia, ordena, desecha lo inútil, repara y acomoda los objetos que están a tu alrededor.
Con el tiempo tu actitud y desempeño se alinearán con tu entorno.
Notarás que te gusta estar ahí. Te sentirás más contento.