No pidas mas dinero prestado del que puedas pagar.
Pedir dinero prestado implica un riesgo grande. Asegúrate de tener recursos para pagar el préstamo en caso que el negocio donde lo hayas invertido no de ganancias para pagarlo.
Si eres digno de crédito, el prestamista va a querer ofrecerte más dinero del que necesitas. No aceptes más dinero prestado del que previamente has considerado estrictamente necesario.
El exceso de liquidez en tu negocio causará que tomes decisiones equivocadas.