Cuando quieres algo, lo mejor es ser claro y directo.
Debes sentirte cómodo diciéndo: "Yo quiero que me des tu Instagram". "Yo quiero invitarte a salir a pasear." Así con naturalidad.
A las mujeres les atraen aquellos hombres que tienen confianza en pedir lo que quieren, pues esa es una cualidad de los líderes. Igual sucederá en tus relaciones de negocios. Cuando solicitas a tus empleados algo, es mejor hacerlo de manera directa y clara. Ellos se sentirán más seguros de trabajar en la dirección correcta.