Ninguna propuesta es una ofensa.

Ninguna propuesta es una ofensa.
En tu vida profesional, si alguien te ofrece pagarte un precio muy por debajo de lo que tu esperas recibir, no lo debes considerar como una ofensa, ya que en el libre mercado ambas partes están buscando constantemente descubrir el mejor precio que convenga a ambos.

En tu vida personal y profesional cuando estés comprando debes atreverte a ofrecer un precio notoriamente bajo por los productos o servicios que alguien pone a la venta. No temas al rechazo o a sentir que estás ofendiendo al vendedor. En algunas ocasiones te sorprenderás que tu oferta fue aceptada y lograrás una negociación favorable.